Medicinal

Marihuana medicinal: el debate de la NBA

Las múltiples lesiones sufridas por los deportistas de elite del mundo son combatidas con una serie de drogas y medicamentos recetados por especialistas y que forman parte de las sustancias lícitas con las que pueden tratar sus molestias.

Pero para palear dolores que muchas veces pasan a ser crónicos, el cannabis medicinal ha sido una alternativa para muchos que ya no compiten profesionalmente. En el caso de la NBA, la liga de básquetbol más importante del mundo, varios jugadores y ex jugadores han manifestado la idea de que la marihuana deje la lista de sustancias prohibidas para el consumo terapéutico.

Uno de los activistas más célebres del uso de la planta como alternativa medicinal es el ex jugador de la liga, Al Harrington, quien disputó 16 temporadas en la NBA, desde 1998 hasta 2014 y que hoy ya retirado, maneja una compañía de extracciones, flores y vapes, llamada Viola Extracts.

Harrington ha liderado una campaña para que los jugadores puedan tratar sus lesiones dolorosas con extractos del cannabis, como él lo hizo en su momento, utilizando CBD para tratar una infección luego de una operación en su rodilla, la que le ocasionaba dolores insoportables.

Desde 1999, el cannabis está en la lista de sustancias prohibidas para el consumo en la NBA, luego de que algunos jugadores de aquella época denunciaran que muchos de sus compañeros llegaban bajo los efectos de la marihuana a entrenamientos y partidos, por lo que comenzó una persecución casi criminal contra la sustancia por parte del comisionado de la liga en esos años, el abogado David Stern.

Sin embargo, la opinión de Stern ha cambiado con el paso de los años. Luego de dejar su cargo en 2014, ha declarado en un par de oportunidades que está convencido de que los tiempos han cambiado, y que ha entendido que la marihuana no sirve sólo para el uso recreativo, si no que también ayuda como sustancia medicinal y es, incluso, menos dañina que otras drogas recetadas por médicos a los jugadores.

Es por eso que el uso medicinal del cannabis está siendo contantemente evaluado por las actuales autoridades de la NBA. Adam Silver, sucesor de Stern como comisionado de la liga, ha dejado entrever que no han descartado su uso como medida terapéutica, pero si ha sido más cauteloso que Stern.

Silver ha comentado que, mientras no haya más pruebas fehacientes de los beneficios médicos que trae consigo el uso de marihuana para tratar lesiones deportivas, no pueden incluirla dentro de las sustancias lícitas.

Así, el desarrollo científico que ha permitido encontrar propiedades en la planta, aún no son suficientes para que se acepten sus usos medicinales. Aunque no ha descartado que se avance en la vía de la legalización. Lo que sí descartó es autorizar el uso recreativo del cannabis entre los jugadores.

De los 30 equipos que componen la liga, 18 de ellos pertenecen a Estados donde la marihuana es legal, por lo que, tal como sucede con el alcohol, los jugadores podrían consumirla sin problemas, pero al estar en la lista de drogas prohibidas, no pueden si quiera realizarlo.

De los jugadores actualmente activos, el pívot de los Minnesota Timberwolves, el dominicano Karl Anthony Towns, ha declarado que está a favor de que los jugadores puedan acceder a la planta para tratar lesiones, aunque se declara no consumista del cannabis, ha visto efectos de esta planta en niños autistas, con los que trabaja en su fundación de beneficencia.

Son muchos los jugadores activos y retirados quienes han reconocido que la marihuana es parte de la cotidianidad de los jugadores, desmitificando que esta afecte al rendimiento en cancha, aunque asumiendo que el efecto es diferente según quien la consuma.

Por el momento, la NBA  se abre a paso firme a asumir el poder de la planta para el uso medicinal.