Activismo

Marc Emery acusado de conductas sexuales inapropiadas

El conocido activista canadiense Marc Emery, que lleva dentro de la industria cannábica luchando por la legalización varias décadas, ha sido acusado recientemente de actitudes poco adecuadas hacia las mujeres.

Emery, también conocido como el “Príncipe de la marihuana” ha sido un líder en el proceso de legalización de la marihuana en Canadá. En 2005 fue arrestado y extraditado a los Estados Unidos por vender semillas de marihuana por carta. Esto le costó cuatro años entre rejas, lo que no impidió que con su mujer Jodie, otra reconocida activista, abriera 6 dispensarios ilegales en 2016. La cadena que regentan, Cannabis Culture, llegó a tener 19 locales abiertos, aunque Vancouver ha ordenado el cierre este mes de tres de ellos.

Emery ha continuado haciendo protestas, ya que no está de acuerdo con el sistema de legalización federal canadiense, por lo que de momento sigue profesando su activismo. Sin embargo, estas nuevas acusaciones de mujeres que afirman haberse sentido acosadas sexualmente por él, le han vuelto a poner en el punto de mira.

La periodista canadiense Deidre Olsen, ha sido la que ha abierto el hilo de estas acusaciones contra Emery en su cuenta de Twitter, al contar que el activista tuvo actitudes muy inapropiadas con ella cuando tan solo tenía 17 años: “me dijo que me sentara en su regazo, y después me dijo que por qué no me pegaba un bongazo de un bong que él estaba sosteniendo entre sus piernas”.

El activista se ha defendido a través de su cuenta de Facebook, en la que ha hecho declaraciones como que sí habla de sexo, pero que nunca ha tenido sexo con alguien menor de 19 años y que cree confiadamente que nunca ha acosado a nadie sexualmente.

Lisa Campbell es otra de las mujeres que se ha sumado a estas denuncias, afirmando que cuando invitó a Emery a dar una conferencia, el activista habló inapropiadamente sobre su pene con estudiantes de los que era mentor. También habla de conductas «cuestionables» con los adolescentes: “en sus tiendas les ha dado marihuana a los menores de edad, diciéndoles que volvieran más tarde sin sus padres y manteniendo conversaciones de contenido sexual”.

En el hilo de Twitter de Olsen, la periodista ha publicado también otros testimonios anónimos de mujeres que han trabajado con Emery en Cannabis Culture, que reclaman que el activista regalaba MDMA en las fiestas de la empresa y tocaba de manera muy sexual las espaldas de sus trabajadoras. Una mujer incluso afirma que cuando ofreció sus servicios como fotógrafa para conseguir dinero para pagar sus multas legales, Emery le dijo que entonces “tendría que pagarle con sexo”.

En su larga defensa publicada en Facebook, Emery habla principalmente del dolor que siente al ver que estas acusaciones han perjudicado a su esposa Jodie Emery y a la imagen de Cannabis Culture, empresa de la que desde 2009 solo ella es dueña. Pide que por favor, no se moleste a Jodie por sus palabras o actos:“probablemente soy un hombre que toca bastante. Pero me gusta pensar que siembre ha sido de una manera modesta y no sexual. Como siempre lo he hecho en público y nunca de manera escondida, todo el mundo lo ha podido ver. Solo ha sido con mujeres y hombres adultos a los que les he frotado la espalda. Pero esta era una de las cosas que también molestaba a Jodie, incluso si yo lo hacía con buenas intenciones, porque podía ser malentendido por los algunos observadores”.

También habla de que muchas de las mujeres que hoy le acusan públicamente, nunca lo hicieron durante el tiempo que mantuvieron una relación laboral, o en las veces que estas mujeres le hicieron visitas, pero que parecen ahora, “estar arrepentidas”. Sin embargo, tampoco oculta que su vida sí ha sido algo llamativa: “la verdad es que he vivido una vida muy abierta, provocativa, posiblemente incluso escandalosa. He prosperado en la controversia. Y he ofendido a la gente. Mucha gente. He defendido a Louis CK, he tenido discusiones con los activistas trans, he sido abiertamente sexual durante toda mi vida, y he sido visto rodeado de mujeres jóvenes porque soy popular entre hombres y mujeres, muchos de ellos adultos jóvenes.”

De momento parece que no se han presentado cargos judiciales contra Emery, que ha seguido defendiéndose en Facebook ante las diferentes acusaciones que han salido a la luz.