KAROL CARIOLA: “SOY PARTIDARIA DE DESPENALIZAR TODAS LA DROGAS”
La diputada comunista tiene un currículum que llama la atención a primera vista. Matrona de profesión, es la primera mujer en ser Presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción, además es la segunda mujer en ser secretaria general del Partido Comunista después de Gladys Marín, y como si todo esto no fuera suficiente, es la primera mujer en presidir la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, desde que asumió en marzo pasado. Y se lo tiene bien ganado, ya que pese a que estamos en pleno año eleccionario, Karol no esboza ningún temor al referirse a la falta de voluntad del gobierno de la Nueva Mayoría, -coalición de la que ella es parte-, en una de sus batallas más largas: La despenalización del autocultivo de cannabis. Así, contra viento y marea, Karol se frustra pero sigue luchando contra la modorra de los viejos estandartes de la politiquería nacional, sabe que su pelea es difícil, pero tiene aún más claro que el cambio cultural que existe es un aliado que antes no existía. Fanática del rock argentino, de Sabina, Silvio y La Polla Records en su época más punketa, la diputada habla de todo y de todos, sin miedo, sin odio… pero con una fuerza avallasadora tan convincente que no dará su brazo a torcer hasta que logre su objetivo.
Por Sebastián Sepúlveda Z. / Fotografía: Francisco Jorquera
Archivos Cáñamo. Fecha original de publicación junio 2017, edición N° 122.
Queremos partir conociendo a la Karol Cariola colegiala, cuando ibas al Liceo Tajamar, que es hasta hora de niñas y no mixto ¿Cómo era esa Karol?
Te voy a ser sincera, era bien perna, me sacaba buenas notas, imagínate que salí con promedio 7 de la básica, y fue justo en octavo básico cuando me empezó a picar el bichito de la política, me acuerdo que en esa época me obsesioné con la Revolución Cubana, entonces empecé a leer, a ver documentales, a imbuirme de ese proceso, y yo creo que desde ahí me fui identificando con una forma de ver las cosas desde el cambio social y obviamente desde la izquierda, con la necesidad de hacer revolución en todos los ámbitos.
¿Y ese despertar político en ti, tienes a alguien como ideal o referente?
Sí, mi abuelo que ya falleció, pero que para mí fue siempre una persona que yo veía con admiración ya que fue un obrero de izquierda, consecuente hasta el final, que me enseñó con su propia forma de ver la vida a no quedarnos paralizados con el status quo, con el estado de las cosas, y él para mí fue un espejo, un hombre a quien admirar y seguir, y que me inspira siempre ya que el ejemplo que daba levantándose todos los días a las 6 de la mañana para ir a trabajar a una barraca, es el símbolo de la gran mayoría de los trabajadores de este país, muchas veces postergados y puestos siempre al final en la lista de prioridades de esta sociedad.
¿Y el colegio como influyó en tu crecimiento?
Al ser un colegio público, dentro del mismo había un ecosistema muy variado con mucha diversidad, con gente que venía de distintos mundos políticos y sociales, de hecho tenía compañeras que eran hijas de gerentes y otras que sus papás eran obreros, y no sólo eso, también tenía amigas lesbianas con las que compartíamos sueños e ideales, por lo que todo lo que hago hoy en el rol que me toca estar, tomo estos temas con mucha mayor naturalidad ya que el colegio me forjó una apertura mental que agradezco profundamente, ya que ayudó a desarrollarme de manera más integral, porque de verdad que ser hija de la educación pública te entrega herramientas que te sirven para toda la vida.
Al ser un colegio municipal de la comuna que en esos tiempos comandaba el Coronel (R) Labbé, ¿Sufrieron censuras de algún tipo?
Si claro, porque Labbé estaba encima todo el tiempo, pero yo recuerdo una que me marcó porque nos pasaron a llevar con una presentación que quisimos hacer, un homenaje por el centenario de Pablo Neruda, pero más allá de la poesía, viendo su característica más política, como senador, exiliado y específicamente queríamos llevarlo a cabo haciendo una representación del poema de Neruda “Yo Acuso” que se lo dedicó al Ex presidente Gabriel González Videla, el mismo que sacó “La ley maldita” donde prohibió la existencia del PC, tiempos en los que Neruda tuvo que permanecer clandestino durante ese régimen. El tema es que justo ese día era además el día de la bandera, nos quisieron silenciar con eso, pero igual hicimos una intervención y nos pusimos a declamar en el patio. Y este hecho no fue casual, ya que para nosotras fue el punto de partida de muchas acciones más que nos fueron dando las armas para pelear por lo que considerábamos justo.
DE SOUNDTRACKS, RISAS Y PARTOS.
Saliendo del tema de la política, ¿Cuál es el soundtrack de Karol Cariola?
La música me encanta, me gusta tocar guitarra y cantar, pero prefiero la música en español que tenga un mensaje más allá, me encanta el rock argentino, Charly García, Spinetta, Cerati, también desde chica escucho mucho Silvio Rodríguez y uno de mis favoritos es Joaquín Sabina porque antes que músico es un poeta, me gusta escuchar lo que dice, el mensaje que va detrás de lo que canta, por eso también prefiero la música en español. También cuando más chica me gustaba mucho el Ska, el punk, de hecho era tan fanática del grupo La Polla Records, que yo tenía una rana que se llamaba Evaristo, igual que el cantante de la banda.
Y entre tanto estrés, entre sesiones, salidas a terreno, discusiones, malos ratos ¿Qué cosas te hacen reír?
El humor irreverente me encanta, no me agrada el chiste con doble sentido, no me causa risa, me gusta el humor negro, de gestos, teatral, por ejemplo me encanta Mr. Bean, los tres chiflados, que los veía con mi papá que era un humorista en potencia y siempre me hacía reír. Y sobre todo me gusta reírme de mí misma, burlarme de mí, porque cuando uno hace chistes de sí mismo te tomas la vida de manera no tan grave, sino que más simple, como debiera ser siempre.
¿Qué te pasó con la polémica entre Cecilia Pérez y Daniel Alcaíno, con su personaje Yerko Puchento?
El humor tiene que tener sus límites, no es por ser grave, es distinto reírse de uno mismo a cuando te ríes de otros, y creo que el límite del humor está marcado por el respeto hacia la otra persona, una cosa es reírse de otros cuando hay complicidad, pero cuando esto pasa a ser ofensivo, a ser dañino para el otro, no me parece nada de gracioso. Tampoco me gusta que se rían de la condición de una persona, por ser lindo, por ser feo, por ser homosexual etc.., o sea si el otro está de acuerdo y se ríe perfecto, pero cuando a alguien le genera problemas es porque pasaste a llevar la libertad del otro. Respecto al tema de Cecilia Pérez hay un poco de eso y también de exageración para tener publicidad, entendiendo que estamos en pleno año eleccionario. Creo que Cecilia agrandó mucho la cosa, de hecho Daniel Alcaíno una vez me tiró un chiste muy ofensivo, de carácter sexual, pero lo hablé con él, sin prensa ni victimizándome en los medios, porque el rol de uno no es andar vetando a la gente.
Sigamos con tu vida…
¡No tengo vida! jajaja, eso también es humor ¿viste?, jajaja.
¿Siempre quisiste ser matrona o fue algo que se dio de manera más casual?
Yo salí de cuarto medio sin tener idea de lo que iba a estudiar, me gustaba el derecho, las ciencias sociales, la medicina, entonces tenía un enredo súper grande en mi cabeza, pero creo que llegué a la obstetricia porque sintetiza muy bien los dos mundos que me interesan, el vínculo con las ciencias duras y el vínculo con las ciencias sociales. Ya que la matrona juega un rol social que es muy cercano a la gente, o sea ¡Que más íntimo que tu vida afectiva, que tu vida sexual!, entonces ser matrona es acercarte no sólo al desarrollo de la mujer en su lado biológico, sino que además en su lado psicosocial, y eso para mí ha sido una tremenda herramienta para entender a la mujer en toda su cosmovisión, desde la sensibilidad de temas como la igualdad de género, los derechos de nosotras y una serie de temas que gracias a mi profesión los pude comprender aún más. Además, esta es una carrera que fue hecha para transformar la realidad y eso es algo que tengo súper claro.
Bueno, y te ayuda porque a veces sacar una ley es un verdadero parto…
¡Todo el rato! , de hecho para mí estar en el Congreso ha sido un parto, pero la parte mala del parto, no la bonita de cuando un niño da a luz.
¿Te frustras mucho en el congreso?
Yo me frustro mucho, y he tenido que aprender a convivir con la sensación de frustración frente a algunas situaciones, me acostumbro poco eso sí y finalmente sigo insistiendo y no bajo la guardia nunca a pesar de que las cosas no me resulten. Pero cuando uno se propone generar los cambios dentro del congreso, es porque lo vamos a hacer y lo estamos haciendo, corriendo la barrera de lo posible, como el caso de la gratuidad en la educación.
DE CONCEPCIÓN Y CANNABIS
Fuiste la primera mujer presidenta de la Federación de Estudiantes de la U. de Concepción, ¿Qué significa para ti esa etapa?
Han sido los 6 años más importantes en mi vida hasta ahora, incluso más relevante que los 3 años que llevo siendo diputada. La U. de Conce construyó mi matriz, me enseñó a aprender a convivir con la diversidad, a enfrentar el debate político desde lo más duro, desde el idealismo más puro, y de alguna manera, me determinó a cómo enfrentar la vida desde ahí en adelante. Es más, mi lucha por la demanda del cannabis, que va más allá de una idea personalista por la despenalización del autocultivo, la empezamos a pelear allá en Conce, donde nos empezamos a vincular con distintos grupos de cannabicultores, de consumidores, para visibilizar el tema más allá de “la chapa” del volado, nosotros logramos darle un contenido político súper fuerte al tema, para que de una vez por todas terminara la persecución hacia los consumidores.
¿Sufrieron censura?
Sí, de hecho nosotros hicimos el primer “Cultiva tus derechos” en Concepción, donde convocamos a toda la universidad e invitamos a expositores de todo Chile para visibilizar aún más el tema, pero en el camino apareció el SENDA que nos puso todas las cortapisas para que no lográramos realizar la actividad y la universidad se asustó y nos quitaron el permiso a última hora. Pero igual lo hicimos, a la fuerza, y a puro pulso montamos el escenario, con un generador porque nos cortaron la luz y no pudieron frenar la actividad, porque para nosotros era un acto de resistencia cultural, donde los que querían censurarnos sólo querían banalizar el tema del cannabis reduciéndolo a la caricatura de un grupo de volados y delincuentes. Por eso yo creo que lo más importante es lograr el cambio cultural , la leyes se pueden modificar, pero los cambios culturales se generan con este tipo de acciones, como lo ha hecho la revista Cáñamo, Fundación Daya, Mamá cultiva, etc. Me quedo corta, pero han sido muchos los que han aportado para terminar con la satanización del tema.
Tu formas parte de la Nueva Mayoría, y entendiendo tu postura frente al cannabis ¿No sientes que ha existido un absoluta falta de voluntad política del gobierno donde ni siquiera se ha sacado al cannabis de la lista 1 de drogas (en el caso del uso medicinal sí se hizo)?
Mira, soy directa, efectivamente ha faltado voluntad política, nosotros nos hemos encontrado con muchas trabas por parte del gobierno, yo creo que en la coalición de la que yo formo parte prima una mirada conservadora respecto a este tema, a pesar de que hay cientos de investigaciones en Chile y Latinoamérica que demuestran que la mirada prohibicionista en política de drogas no ha dado resultados en ningún lugar del mundo.
Se castiga al consumidor, no al narcotráfico…
Efectivamente, o sea los datos que ustedes publican, que el 65% de los detenidos son por consumo, porte y cultivo, indican que los recursos destinados a la seguridad ciudadana están dirigidos de manera absolutamente equivocada hacia la persecución de los consumidores y cultivadores, y no sobre los verdaderos tipos que deberían estar sin libertad , como son los narcotraficantes, que tienen a nuestras poblaciones más populares prácticamente sitiadas y a la gente de escasos recursos muertas de miedo prisioneras en sus propias casas, porque lamentablemente es mucho el poder que tienen.
¿Entonces quién le pone el cascabel al gato y se hace cargo?
Yo creo que el gobierno tiene temor a enfrentar el verdadero problema que es el narcotráfico, por eso para mí, resolver la regulación del autocultivo de cannabis es fundamental, y le estamos sacando el poto a la jeringa, porque el gobierno ha optado por el camino más fácil que es perseguir al consumidor, al cultivador, que es una política no sólo errada sino que súper peligrosa porque hace más fuerte aún al mercado negro, y eso lamentablemente termina dañando a los sectores más populares de nuestro país.
«Este gobierno demostró no tener voluntad política para desarrollar una nueva política de drogas, siendo que este problema nos golpea en la cara continuamente. El narcotráfico se ha instalado y se ha empoderado a tal nivel que son capaces de controlar territorios completos, donde cotidianamente mueren niños víctimas de esta guerra entre bandas. ¿Qué estamos esperando? ¿Qué muera una autoridad política para reaccionar?. Y es el prohibicionismo impuesto por nuestras autoridades el que básicamente mantiene protegidos a los narcos, porque tenemos una ley que no se hace cargo del problema de fondo y que lo único que hace es detener a la gente que precisamente debe estar libre, ¡Estamos criminalizando a las víctimas!. Una contradicción por donde se mire.»
Y seguimos viendo la deficiencia, la falta de voluntad política, por ejemplo en el pésimo accionar del SENDA…
El problema base es que este gobierno demostró no tener voluntad política para desarrollar una nueva política de drogas, siendo que este problema nos golpea en la cara continuamente. El narcotráfico se ha instalado y se ha empoderado a tal nivel que es capaz de controlar territorios completos, donde cotidianamente mueren niños víctimas de esta guerra entre bandas. ¿Qué estamos esperando? ¿Qué muera una autoridad política para reaccionar?. Y es el prohibicionismo impuesto por nuestras autoridades el que básicamente mantiene protegidos a los narcos, porque tenemos una ley que no se hace cargo del problema de fondo y que lo único que hace es detener a la gente que precisamente debe estar libre, ¡Estamos criminalizando a las víctimas!. Una contradicción por donde se mire.
¿Y la Presidenta tiene alguna responsabilidad en todo esto?
Indirectamente, porque lamentablemente me consta que ella sabe que la criminalización no es el camino, en algún momento ella tuvo la voluntad, pero las autoridades de gobierno responsables de estas materias han sido incapaces de ver estas situaciones, y lo digo especialmente por el ex Director de SENDA, Mariano Montenegro y también por la responsabilidad que le cabe al Ministerio del Interior, porque si bien el actual ministro Fernández tiene una apertura mayor, no ha sido una prioridad para él y eso ha quedado reflejado en que la ley que hemos intentado sacar adelante con mucho esfuerzo desde el parlamento , hoy día ha sufrido distorsiones profundas producto de la falta de compromiso, y lo quiero decir con todas sus letras, de parlamentarios de la Nueva Mayoría, que se ausentaron muchas veces de procesos fundamentales de la tramitación.
¿Estás dolida con el gobierno?
Es que estuvimos meses esperando indicaciones, estuvimos años esperando que el gobierno se hiciera parte de la discusión en serio, y cuando se hicieron parte, presentaron indicaciones con elástico, con trampa, porque ellos enredaron todo a propósito, generando una discusión que no tuvo acuerdo en la Nueva Mayoría y nos dejaron en el aire porque no pudimos respaldar estas indicaciones del ejecutivo, porque condicionaron las convicciones que teníamos respecto de las cantidades, me refiero a las seis plantas, me refiero a los 10 gramos de porte, me refiero a los 500 gramos de tenencia, que no fueron cantidades antojadizas, fueron en base a estudios hechos y presentados por nosotros, que el ejecutivo pasó por alto, generando que la derecha se aprovechara para desvirtuar el sentido del proyecto.
¿Y en qué estado está ahora el proceso de tramitación de la Ley? ¿Se puede lograr algo?
La verdad es que yo no estoy dispuesta a seguir la tramitación del proyecto, teniendo a las organizaciones, el gobierno y los parlamentarios en contra. Es que esta es una situación
«Nosotros no queremos “cannabizar” el debate, queremos despejar este punto, lograr legislar para despenalizar el cultivo y luego generar una nueva política de drogas que incluya a todas las otras, de hecho yo soy partidaria de la despenalización de todas las drogas, es la única forma de frenar el narcotráfico».
que nos ha puesto en un punto de no retorno frente al debate que estamos dando. Pero también quiero decir que nunca se ha avanzado tanto en la legislación sobre el cannabis, y no ha sido gracias al gobierno. Estamos conscientes de que todo este esfuerzo por un cambio de mentalidad cultural no se puede tirar a la basura, por lo que estamos pensando qué pasos vamos a dar en adelante para no perder todo el terreno ganado, incluyendo la aprobación general en la Cámara de Diputados, que volvió a la comisión (de salud), y que lamentablemente por la falta de compromiso de los diputados de la derecha, del gobierno y de algunos diputados de la Nueva Mayoría nos hicieron retroceder.
¿Y qué pasos concretos van a dar?
Nosotros no queremos “cannabizar” el debate, queremos despejar este punto, lograr legislar para despenalizar el cultivo y luego generar una nueva política de drogas que incluya a todas las otras, de hecho yo soy partidaria de la despenalización de todas las drogas, es la única forma de frenar el narcotráfico.
Necesitamos nombres, conocer a nuestros verdaderos enemigos ¿Quiénes son los parlamentarios que han puesto freno a una ley que estaba bien encaminada?
Obviamente la derecha se lleva todos los premiados con personajes como José Antonio Kast, Javier Macaya, Gustavo Hasbún y el diputado de la Nueva Mayoría Daniel Farcas, que han desvirtuado el camino y sólo han puesto trabas para lograr una legislación en pos de la despenalización.
Si despenalizamos el cultivo, mucha gente por distintos motivos (económicos, de espacio, usuarios esporádicos) van quedar fuera y no tendrán acceso al cannabis ¿Han pensado en otras alternativas como los clubes cannábicos y dispensarios?
Nosotros estamos trabajando en el tema de los clubes cannábicos como una forma de acceso a otros usuarios, pero antes tenemos que despejar muchos temas, partiendo de la base que sean dados por organizaciones sin fines de lucro, donde el Estado sea el principal regulador.
Finalmente, no podemos terminar la entrevista sin saber ¿Cuándo fue la primera vez que consumiste cannabis?
En la universidad y mucho más de una vez, jajaj. Y el año pasado tuve la oportunidad de compartir con mi padre el consumo de aceite de cannabis, ya que él tenía un cáncer – ya falleció- y todos nos hicimos parte de este proceso, acompañándolo. No cultivamos, pero Fundación Daya nos apoyó en todo este proceso que reafirma mi voluntad de seguir dando la pelea por la despenalización del cultivo.